El aluminio es recuperable en un 95% según el informe sobre Declaración Ambiental del Producto elaborado por primera vez por la Asociación Española del Aluminio y Tratamientos de Superficie (AEA) ahorrando el mismo porcentaje en lo que a energía usada en su producción inicial se refiere. El mismo que señala que ya un 39% del aluminio reciclado este contenido en la materia prima con la que se fabrica el perfil de aluminio, mientras que el 61% restante corresponde al aluminio primario
Uno de los aspectos resaltantes de este documento, que se apoya en los datos de producción de perfiles de aluminio fabricados en 2017 en el que participaron más de 600 empresas del sector, es el impacto ambiental de este material, el cual es considerado uno de los más reciclables del mundo y que se encuentra involucrado en muchas actividades económicas colocándolo a la cabeza del desarrollo de la economía circular.
El Secretario General de la AEA, Jon de Olabarría, señala que “la Declaración Ambiental del Producto deja de manifiesto que el aluminio resulta un gran aliado en las nuevas estrategias europeas, que no hacen sino impulsarnos a caminar hacia un sistema económico y social eficiente en cuanto al uso de los recursos, en el que el aluminio es la clave.”
Sectores de embalaje, transporte, transmisión eléctrica, bienes de uso doméstico, entre otros son algunos de los principales usuarios de este metal que permite medir el impacto ambiental o la huella de carbono que dejan y que contribuye al llamado calentamiento global. Según datos de la AEA.”Teniendo en cuenta todos los perfiles de aluminio estudiados en la DAP (anodizados y lacados con y sin con rotura de puente térmico), los valores para el calentamiento global (CO2) oscilan entre los 10,3 y 11,8kg de CO2 por cada Kg de perfil. Y el reciclado de los perfiles supone una exención comprendida entre el 3,0 y 4,0 kg de CO2 por kg de perfil.”