Los precios del petróleo cayeron el lunes, después de que el plan de estímulo de China decepcionara a los inversores que buscaban un crecimiento de la demanda de combustible en el segundo consumidor mundial de petróleo y mientras el dólar estadounidense subía.
El West Texas Intermediate (WTI) rompió por debajo de los $70 por barril el lunes, mientras que el huracán Rafael se debilitó a una tormenta que es poco probable que cause daños a la producción de petróleo de EE.UU. en el Golfo de México.
El dólar avanzó un 0,40%, mientras los operadores se preparaban para una lectura clave de la inflación al consumidor de EE.UU. esta semana, así como para un desfile de oradores de la Reserva Federal, incluido el presidente Jerome Powell el jueves.
Un dólar más fuerte hace que las materias primas denominadas en billetes verdes, como el petróleo, sean más caras para los tenedores de otras divisas y tiende a pesar sobre los precios.
Los precios del crudo
Los futuros del crudo Brent caían 1,10 dólares, o un 1,5%, a 72,77 dólares el barril hacia las 1101 GMT, mientras que los futuros del crudo West Texas Intermediate estadounidense se situaban en 69,17 dólares el barril, con un descenso de 1,21 dólares, o un 1,7%. Ambas referencias cayeron más de un 2% el viernes.
Los precios del petróleo también bajaron después de que se disipara la preocupación por las posibles interrupciones del suministro provocadas por la tormenta Rafael en el Golfo de México.
Más de una cuarta parte de la producción de petróleo y el 16% de la de gas natural del Golfo de México seguían desconectadas el domingo, según el organismo regulador de la energía en alta mar.
El mercado se centrará ahora en la reunión del Politburó y la Conferencia Central de Trabajo Económico de China a realizarse en diciembre, donde se espera anuncien más medidas anticíclicas a favor del consumo.
El viernes, Beijing anunció nuevas medidas de estímulo centradas en el sector inmobiliario y la demanda de bienes de consumo. Al parecer, esto no fue suficiente para los analistas petroleros.
En China, los precios al consumo subieron en octubre al ritmo más lento en cuatro meses, mientras que la deflación de los precios al productor se profundizó, según mostraron los datos el sábado, incluso cuando Pekín redobló los estímulos para apoyar a la tambaleante economía.
Las cifras de la inflación china volvieron a ser débiles, y el mercado teme una deflación, sobre todo porque la variación anual del índice de precios a la producción cayó aún más a territorio negativo y el impulso económico chino sigue sin ser efectivo.
Las últimas medidas de apoyo no reactivarán el crecimiento de la demanda de petróleo de China ni las importaciones de crudo, afirmó Tamas Varga, analista del broker petrolero PVM. Tras las elecciones presidenciales de EE.UU. de la semana pasada, la atención está volviendo lentamente a los fundamentos subyacentes.
De cara al futuro, también hubo preocupaciones de que la producción de petróleo y gas de Estados Unidos podría aumentar bajo la nueva administración Trump, aunque los analistas dicen que es poco probable que cambie el pronóstico de producción de 2025.
La promesa electoral de Trump de subir los aranceles a las importaciones para impulsar la economía estadounidense ha enturbiado las perspectivas económicas mundiales, aunque las expectativas de que podría endurecer las sanciones a los productores de la OPEP Irán y Venezuela y recortar el suministro de petróleo a los mercados mundiales provocaron en parte que los precios del petróleo ganaran más de un 1% la semana pasada.
